Descubriendo a Laura Arrieta y su carrera como diseñadora #HelloDFWorld
Desde Los Ángeles, California, Laura Arrieta habla sobre su carrera como diseñadora, inaugurando así nuestra sección de artistas mexicanos que nos representan fuera de México, HelloDFWorld.
¿Cuándo y como descubriste tu pasión por el diseño?
Recuerdo que cuando era niña mis juego favorito era crear lo que serían sets y armar espacios interiores. También empecé a hacer ropa, para muñecas y más grande para mí. Cuando iba en la secundaria y luego en la prepa mis maestras de las clases de arte me dijeron que debería estudiar Diseño Gráfico y ahí fue cuando vi que todo lo que me gustaba hacia sentido con esa profesión, o al menos más con esa que con otras.
¿Qué estudiaste, dónde y cuál fue la mejor experiencia de esa etapa?
En México hay muy pocas opciones y menos en el sector público, prácticamente era Arquitectura o Diseño Gráfico. Industrial por alguna razón ni me pasó por la mente. Elegí Gráfico porque me pareció lo más neutral para poder inclinarme hacia otros campos que también me interesaban como moda, espacios, cine, música… Mis papás estudiaron en la UNAM así que apliqué para entrar ahí y pasé a la primera, hice tres semestres, al cuarto me salí y revalidé materias en la Ibero, de donde me gradué en el 2015.
Creo que la mezcla de esas dos experiencias enriqueció mi visión y esos contrastes han sido una constante. También el hecho de haber alargado mi vida estudiantil fue importante para valorar más todo. A veces me da muchísima nostalgia acordarme de haber ido a la universidad… las horas super largas, tomar siestas en mi coche, ir a Santa Fé en el frío y la lluvia escuchando Ibero 90.9 en el radio, las clases, mis compañeros, algunos maestros super inspiradores y chistosos como Lydia Lavín y mis papás llevándome de Satélite a un Lumen 24 horas por CU a imprimir a las 3 de la mañana porque presentación a las 7 am en Santa Fé.
La mejor experiencia en el sentido académico-profesional fue mi servicio social que lo hice en Archivo Diseño y Arquitectura cuando Regina Pozo era Directora. Ahí tuve oportunidad de participar en proyectos de gran escala e impacto social que involucraban sectores privados, de gobierno, nacionales e internacionales. Haber pasado por Archivo definió el camino que tomé en el diseño.
¿Qué otras cosas han sido claves en dirigir tu carrera y llevarte a Los Angeles?
Después de graduarme empecé a trabajar en un estudio de diseño ubicado en el Centro Histórico del DF que se llama Bala, ahí estuve trabajando casi dos años súper de cerca con los dos directores fundadores y aprendí mucho al estar involucrada en todas las partes del proceso de diseño, el tipo de proyectos se asemejaba un poco a mi experiencia previa en Archivo, pero ahí ya fue totalmente identidad de marca y diseño estratégico.
También viajar y la música han sido muy importantes. Cuando iba en la universidad por las vacaciones largas pude ir a UK y Europa, pero cuando trabajaba en México ya no tenía tiempo, entonces empecé a ir a Estados Unidos en viajes relámpago a ver amigos tocar shows. Hubo un tour de M83 al que les caí a varios de sus shows en diferentes ciudades entre otras a Austin, Texas, donde siempre buscaba un pretexto para regresar porque tengo amigos ahí. Estando en la casa de uno de los Black Angels yo estaba diciendo cuánto me gustaba la vibra de ahí y alguien dijo “deberías mudarte aquí”. Siempre me había atraído la idea de vivir en un lugar donde se “respirara” música y por primera vez no tenía algo que me amarrara a México así que empecé a investigar y las cosas se tornaron hacia Los Angeles, donde siete meses después aterricé.
La experiencia de LA fue otra clave, mi roommate toca en HEALTH y una vez que grabaron un video dirigido por Zev Deans me invitaron a la filmación para salir de extra. Esa fue la primera vez que oficialmente estuve en una producción y me encantó, pero lo mío es tras bambalinas así que a partir de ese momento empecé a descubrir el mundo del Departamento de Arte y ahí confluyen muchos caminos de lo que me encanta. Sigo descubriendo ese mundo, siento que el Diseño de Producción es como un proyecto de identidad pero enorme, narrativa a través de muchos más medios. Hasta ahorita me ha gustado mucho balancear entre diseño gráfico, trabajando principalmente en la compu con mucho más input creativo con algunos proyectos de departamento de arte que son súper movidos y hay mucha más gente involucrada y dirección que seguir.
¿Qué puedes decir de la situación del diseño en México y en el extranjero? ¿qué recomendarías a alguien que busque ejercer en el extranjero?
Creo que México es tan rico y complejo en historia y cultura y todo es tan surrealista y mágico que no lo valoramos en su totalidad estando desde adentro y, por desgracia, el sistema se aprovecha de eso y también de que los mexicanos somos gente súper trabajadora y educada.
Creo que instituciones como Archivo, dedicadas al diseño, son cruciales para profesionalizar la producción artística y trabajar hacia obtener mejores pagos y condiciones laborales. En Estados Unidos en las industrias creativas, al menos en LA hay muchas uniones de trabajadores, eso y otros factores socioeconómicos hacen que el trabajo calificado creativo sea muy valorado, respetado y bien pagado. Pero las cosas se mueven muy, muy rápido.
En mi experiencia, el DF es percibido como el lugar más cool, lleno de arte y diseño. El imaginario colectivo y las referencias visuales con las que crecemos los mexicanos y chilangos en particular son invaluables. Debemos potenciar eso. Todos mis amigos que han ido quieren regresar y los que no han ido quieren ir, es el lugar favorito en todo el mundo de muchas bandas, como Black Lips.
Creo que hay muchos caminos y descubrirlos uno mismo es la forma en que las cosas suceden, un consejo sería que lo que parece una desventaja puede ser la gran ventaja. Me cayó el veinte de esto en una filmación de un video para Trinidad James donde aparte de la productora yo era la única mujer en el crew, el resto eran hombres super altos y fuertes, con cinturones llenos de todas las herramientas que existen en el mundo, entonces me apliqué a usar mis habilidades creativas de solución de problemas y mi tamaño para enfocarme en detalles, que al final arman el todo y agregan valor.
¿Qué es lo que más te gusta de hacer diseño y qué consejo le darías tanto a los futuros diseñadores o quien quiera cambiarse de carrera y dedicarse al diseño?
Para mí lo mejor del diseño es la capacidad real de creación y transformación y poder hacer un impacto positivo en la sociedad y el mundo. En el día a día lo que más me gusta es poder trabajar con proyectos diferentes y aprender de muchos temas distintos.
Mi consejo sería, hacer las cosas por pasión y de manera genuina, el resto se acomoda y que todo suma, algo pueda parecer sólo un pasatiempo puede generar conexiones tanto con personas como para encontrar nicho profesional o en el mercado.
Para ver más del trabajo de Laura, síguela en Instagram o visita su sitio web donde también puedes encontrar su contacto para cualquier pregunta tanto comercial como de mentoría profesional.
@laurarrietag