Levantan edificios sobre falla geológica en la Delegación Benito Juárez

 
Albercas, fosas de clavados y buceo, así como waterparks e incluso pistas de hielo, forman parte de los beneficios ofertados por las grandes compañías inmobiliarias en la delegación Benito Juárez, que desde hace tiempo padece escasez de agua potable, denunciaron habitantes de las colonias General Anaya y Santa Cruz Atoyac, quienes exigieron a las autoridades de la demarcación poner un alto a la construcción de esos megadesarrollos.
Durante un recorrido, señalaron que es indispensable analizar cuál ha sido el impacto causado la vorágine inmobiliaria en el perímetro delegacional, tras señalar que tampoco se ha tomado en cuenta la presencia de una falla geológica que va desde General Anaya hasta Zacahuitzco.
En menos de tres años se han registrado cuatro socavones sobre Popocatépetl, en el tramo que va de Universidad a Cuauhtémoc; el más reciente ocurrió el mes pasado, sin embargo, las autoridades siguen dando permisos para edificos de gran altura, expuso Javier Méndez, integrante del Movimiento en Tierra Firme.
Como botón de muestra, expusieron, está el polígono comprendido entre la avenida Popocatépetl, Río Churubusco, Universidad y Eje 7, donde están en proceso de construcción 12 proyectos inmobiliarios, que van desde los seis niveles, como los ubicados en Pirineos 223, 239 y 247, hasta los 80 pisos, entre ellos la polémica torre Mitika, que después de estar suspendida reinició los trabajos de edificación.
De todos ellos, los que más preocupan a los residentes de ambas colonias son los condominios de las llamadas City Towers. Se han construido cuatro desarrollos de este tipo en la avenida México-Coyoacán, en Cuauhtémoc y Eje 8 Sur y van por el quinto en Popocatépetl número 415, que en 22 pisos albergará 750 departamentos, detallaron en una queja entregada en la delegación Benito Juárez.
Su publicidad es por demás ofensiva cuando ofrecen como uno de sus atractivos siete albercas y mil metros de parque acuático, con chapoteaderos y toboganes, cuando invariablemente se realizan cortes al suministro de agua, apuntaron.
José Aguilar, administrador de la unidad habitacional Popocatépetl, indicó que aún cuando cuentan con 15 cisternas, el servicio es tan irregular que se ven obligados a adquirir el líquido mediante pipas. Nosotros tenemos donde almacenar el agua, pero hay quienes invariablemente se quedan sin nada, apuntó.
Javier Méndez aseguró que además del impacto negativo que generará en la comunidad, City Tower en Popocatépetl 415 se levanta sin haberse realizado una consulta entre los vecinos, como lo estipula la ley al estar en una zona patrimonial. No hay nada que lo certifique o al menos no lo han presentado, apuntó.

 
Fuente:Periódico La Jornada
Domingo 26 de febrero de 2017, p. 27
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